La víspera de la festividad de la Patrona de Sevilla y su Archidiócesis, la Virgen de los Reyes, será este año aún más especial si cabe. No en vano, el 14 de agosto quedará definitavemente ubicado e inaugurado uno de los monumentos que con más ganas se estaba esperando desde hace meses: el del Beato Juan Pablo II, que, como todos sabíamos ya, se colocará junto al Monasterio de la Encarnación, es decir, casi frente a la Puerta de Palos de la Catedral (recuérdalo aquí).
Así lo han confirmado durante los últimos días tanto el Ayuntamiento como el Arzobispado, avanzando que todo se hará oficial en una ceremonia que comenzará a las 21.30 horas, justo al término del último día de la novena de la Virgen de los Reyes. En ese momento, la imagen que recrea la figura del primer Papa que visitó Sevilla habrá dejado para siempre la ubicación en la que ha estado esperando su sitio durante las últimas fechas, frente a la Puerta de San Miguel, en el interior de la Seo.
Y es que aunque ya conocía que iba a estar a cielo abierto, hasta ahora no se conocía la fecha exacta en la que lo haría, un misterio que, definitivamente, ha quedado desvelado. De este modo, queda aún más claro si cabe que Juan Pablo II, vino para quedarse, hasta el punto de que a partir de agosto permanecerá para siempre a la vera del principal templo de la ciudad, desde donde no se perderá detalle de todo lo que ocurra durante la Semana Santa. Como un sevillano más, aunque viviese en Roma y hubiese nacido en Polonia.
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