Mucho, muchísimo se ha hablado en los últimos tiempos de un posible cambio de horario para la hermandad de La Resurrección. El hecho de que Asenjo le cerrara por completo las puertas del Sábado Santo obligaba a la hermandad a replantearse su situación como cierre de la Semana Santa, abriendo el camino a una salida más tardía que ayudase a evitar problemas durante el recorrido. En este sentido, muchos daban por hecho que la cruz de guía de la corporación de Santa Marina saldría casi coincidiendo con el amanecer y volvería a estar en casa a media tarde (recuérdalo aquí).
Sin embargo, el pasado fin de semana se llevó a cabo el cabildo en el que se tomó la decisión definitiva sobre este aspecto y, sorprendentemente, todo se quedó como estaba. Así lo dictaminaron 112 de los 211 hermanos que asistieron a la reunión y que, pese a tener vía libre para reformular la jornada, optaron por hacer suyo eso de "Virgencita Virgencita, que me quede como estoy". En este sentido, hay quienes apuntan a que todo se puede deber a la importante campaña que ha llevado a cabo el sector más inmobilista de la hermandad, que todavía se muestra reacio a abandonar sus viejas aspiraciones 'sabadistas' y que, por tanto, vería un cambio de horario como una renuncia definitiva.
El caso es que, ya sea por convicción o por relativa imposición, los días grandes volverán a cerrarse en 2013 como siempre, al primera hora de la tarde y con los sones de Amarguras acompañando a un palio que vemos cómo se pierde tras la oscuridad de una ojiva. Nada cambiará, al menos de momento, ofreciéndonos una vez más esa 'semimadrugá' con la que cada años apretamos sensaciones y vivencias en la recta final de nuestra Semana Santa. Porque a poco más de cuatro meses para que todo dé comienzo, ya sabemos que el broche de oro seguirá sin variaciones.
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