Tras hacerse esperar demasiado, parece que por fin se ve la luz al final del túnel en Santa Catalina. Porque si hace unos meses se anunciaba a bombo y platillo que las obras que necesitaba el templo iban a desarrollarse a la mayor brevedad posible (recuérdalo aquí), ahora ya se sabe que esa promesa se hará realidad de manera inminente, hasta el punto de que se llega a asegurar que los trabajos podrían estar acabados en cuestión de doce meses, poniendo así fin al prolongado exilio que viven corporaciones como La Exaltación o El Carmen, que, como muchos sevillanos, no ven el día en el que por fin esta iglesia vuelva a abrir sus puertas.
A ello ayudará la constructura San José, que, probablemente sea la más indicada para ello. No en vano, más allá de su profesionalidad, pocas tendrán mayor compromiso con que todo llegue a buen puerto lo antes posibles, ya que el hermano mayor de La Exaltación, José Manuel Marcos, es uno de sus principales directivos. Y más ganas que tiene él de que por fin se reabra al culto el templo no tienen nadie. Además, únicamente queda que Urbanismo dé las licencias pertinentes para comenzar los trabajos, algo que, en principio, no debe demorarse mucho en el tiempo, por lo que el movimiento debe arrancar en cuestión de unas pocas semanas a lo sumo.
En definitiva, que parece que tras mucho esperar, desde verano de 2004, por fin de están sentando las bases para que Santa Catalina regrese a la vida de una vez por todas. Como muchos reclamaban, por fin se ha pasado de las promesas a los hechos y aunque todavía quedan pequeños flecos que resolver, cada vez parece más claro que, de no surgir contratiempos, en 2015 recuperaremos una de las iglesias más señeras de la ciudad, catalogada incluo como Bien de Interés Cultural. Porque ahora sí ha llegado el momento, lástima que haya tenido que transcurrir prácticamente una década para que la luz se hiciese mostrando claramente el final del túnel.
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