Hace poco más de una semana hablábamos del monumento a Juan Pablo II que se ubicará en la plaza Virgen de los Reyes dentro de aproximadamente un mes (recuérdalo aquí), la segunda imagen del Beato en la ciudad tras la de la hermandad de El Juncal (míralo aquí). Pues bien, hoy tenemos que hacerlo de otra que en breve, concretamente en septiembre, será entronizada en otro templo hispalense. Será en Triana, demostrando que, aunque la física invite a pensar que no, en la capilla de La Estrella cabe otra talla de tamaño natural.
Aunque su autor, Navarro Arteaga, la haya hecho con cierta trampa. No en vano, el imaginero ha gubiado al Santo Padre sentado, repitiendo el mismo 'juego de pies' del Señor de las Penas. Además, se sabe que vestirá su característica sotana blanca, la muceta roja y la estola denominada de 'los evangelistas', así como que será ubicado en un pequeño altar en el testero derecho de la capilla, frente a la tienda de recuerdos de la corporación. De este modo, la cofradía rendirá su particular homenaje al primer Papa que visitó la capital hispalense.
Y, también con esta obra, Triana da forma ese Sumo Pontífice que durmió hacia la otra vida para ir por la vía rápida al Cielo. Porque la orilla más marinera de la ciudad ya lo veneraba desde hace tiempo en la Capilla de los Marineros, en ese cuadro en el que, curiosamente, se repetían los tonos y la actitud sedente. Ahora, se ha obrado un nuevo milagro y se ha escapado de la pintura, para vivir eternamente en la casa más grande de la calle San Jacinto, esa que pese a parecer pequeña a simple vista queda claro que tiene sitio de sobra para cobijar a más gente.
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