viernes, 23 de noviembre de 2012

Un año de flauta y tamboril

Hace unos días hablábamos de que el 2013 va a tener un importante componente mariano. Basta recordar las extraordinarias protagonizadas por imágenes de la Madre de Dios que van a tener lugar en Jerez y Granada (recuérdalas aquí) o, sin salir de Sevilla, las salidas de la Virgen de los Reyes en abril, por el Año de la Fe, e, incluso, la de las Angustias de Los Gitanos allá por octubre por el XXV Aniversario de su Coronación Canónica. Y, a todas estas se va a sumar en agosto otra que, a buen seguro, será masiva. Tendrá lugar en Almonte y a la Virgen del Rocío como protagonista.

Y es que aprovechando que se cumple el II Centenario del Rocío Chico, que la Reina de las Marismas está en Almonte y que Benedicto XVI ha decretado que el 2013 será Año Mariano para esta advocación, la Virgen paseará por las inmediaciones de su aldea. De este modo, la Blanca Paloma procesionará hasta cuatro veces el próximo año, toda vez que hay que sumar a esta salida, la de su Romería, el traslado a su santuario y la que tendrá que realizar por Almonte antes de regresar a su casa.

Por este motivo, qué duda cabe que 2013 no será un año más para todos los rocieros, que tendrán la oportunidad de poder disfrutar de su devoción como nunca, haciendo que el camino, esta vez con toda la razón del mundo, más idas y vueltas. Porque, a este paso, nos van a faltar días para anotar días grandes en el calendario. Y es que esta vez las cosas serán bien diferentes, ya que no habrá que esperar tanto, puesto que lo excepcional, a la vista está, irá sucediendo casi a diario.

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